pronto
el cálido arroyo
del
perfume en sus piernas
ligeras
y cansadas
de caminatas
profundas
de
bosques perdidos
camino
largo y entreverado
en su cuerpo de ilusiones deseadas
de fríos sueños y banderas
Acariciando
un cuento, está
la fantasía que sostiene su aliento
en
los años de noche fría
para
no perder el humor
Mirada
de sostén,
un poema agitado
de prisiones
encierros
y deidades
las lleva en secreto,
por
nubes de insomnio
de
sueños despiertos
y alguna risa afónica
alargado en sombras escondidas
verdades arrancadas,
de victorias perdidas
de victorias perdidas
niña
mujer extendés en tu tierna
cintura del ayer que descansa
cintura del ayer que descansa
en
esa delicia exquisita de
del nomeacuerdo, de gritos y gemidos
casas vacías
casas vacías
respirás en tu estadía
en el mundo preciso
donde está tu hogar